Parece que el
especial del día para todo puertorriqueño es taco. No me refiero a la comida típica
de México, sino el que muchos cargamos en la garganta luego de anoche. Eso es
normal aunque hay al menos 7 puntos que deberíamos tocar hoy 23 de marzo.
1.
Somos
puertorriqueños en las buenas y en las malas. No se puede apoyar solamente en
victoria y eso es una lección que nos han dado muchas veces pero que nos
seguimos colgando en la prueba. Es fácil irle a tu equipo cuando gana, pero si
tú te sientes mal, imagínate lo que sienten los muchachos del equipo. Confieso,
no pude terminar de ver el juego y aunque está mal de mi parte, de verdad que
en parte lo hice porque quería ver si los dejaba tranquilo si pudiesen sacarse
una del buche porque le entra a uno lo de supersticioso de que le está salando
el juego a los muchachos. Desafortunadamente, tuvimos una noche mala y el pitcher
de Estados Unidos estaba enfocado anoche.
2.
Desearle
mal a Stroman no cambia el hecho de nada y sólo nos hace lucir mal. El muchacho tenía un trabajo y lo
hizo más que bien. Hay mucha gente que le ha dicho vende patria y se le ha
mentado en la madre incluso por decir fuck you al equipo y miles de otras. La
realidad es que hay mucha emoción en ese juego y le echaron fiero para el
último juego y no se iba a quedar dado. Sabrá Dios las miles de cosas que le
dijeron, pero la realidad es que le dieron motivación y nos clavó, punto. En un
juego con mucha emoción, el equipo de EE UU jugó con mucha disciplina y con mala sangre, el cual nos
va en contra. Nosotros somos un pueblo de emoción, impulso y entusiasmo, y por
cómo estábamos anoche fue el resultado que tuvimos y me explico en el próximo
punto.
3.
Cuando
se pasa bien NADIE nos gana. Todo juego que Puerto Rico se estaba divirtiendo ganó
y
si ves los highlights, el nivel de juego de nuestro equipo cuando tenemos
gozo en el alma no tiene competencia. Anoche los nervios y la tensión nos llevó
por el camino de la derrota. No es la primera vez que pasa y no será la última
y para mí la lección es que si estoy de buen ánimo y feliz, el mundo no tiene
nada que buscar conmigo. Eso es por mi familia, por la sangre que llevo por dentro y el país
en donde nací y crecí. Esta es la lección más importante a recordar porque a
menudo llegamos al punto que abacoramos a los nuestros a nivel de que no la
puedan pasar bien y a veces nos tenemos que acordar que nuestro trabajo es
apoyar, no exigir… ni mucho menos distraer.
4.
Hay
MUCHA gente que debe aprender a callar porque les brindamos muchísimas
distracciones a nuestro equipo. Empecemos con la esposa de Javi Báez. Cualquier
opinión que tengan de la mujer de Báez se la puede quedar al igual que
cualquier opinión de la esposa de Miguel Cotto y cualquier representante de
nuestro país. Meternos no nos toca pero a muchos les encanta meter cizaña. Esto
fue una de muchas distracciones y debería premiarse con que le lleven los
privilegios de redes sociales a cualquier persona que tuvo algo que decir.
Felicidades a Javier Báez por responder de una manera tan simpática y políticamente
correcta… a diferencia de otros.
5.
La
política no tiene lugar alguno en nuestro rol fuera del entorno de la política.
Sin embargo y como a menudo, se metió la política y de qué manera. El mensaje
es simple, zapatero a su zapato; enfóquese en su trabajo. Hay quienes dicen que los muchachos como le pidieron el vuelo a la Isla se lo buscaron. Hay otros que dicen que fuese o no, le caerían chinches a Ricky, el cual estoy de acuerdo... pero hubiese preferido la otra opción. El gobernador electo quiso
robar cámara y hacer un show y un mensaje unificador… le robó la atención al
equipo y muchos dicen que lo saló. Si lo saló o no, no es lo que importa. Lo
que importa es que brindó OTRA distracción con lo del día de celebración… lo
cual lleva al próximo punto.
6.
No se
celebra hasta que se gana. La gente miró estadísticas, el que ganamos y otros
factores y nos confiamos. Nos ha pasado antes y a diferencia de otros puntos,
espero que aprendamos de esta. Hay que irle a los nuestros, pero nunca
exigirles ni confiarnos… puñeta.
7.
La
palabra puñeta nos identifica. Nos une y nos sirve para las buenas y las malas.
Hay quienes se ofenden por el uso de la palabra. A esa gente les recomiendo que
se dejen de cosas. Muchos boricuas utilizamos la palabra y es una palabra. El
año pasado con Mónica Puig, el equipo de baloncesto, Tito y ahora este gran
equipo ha utilizado esta palabra y es nuestro talismán en las buenas y en las
malas. Captura ese sentimiento mejor que la poesía más florida porque es una
palabra que utilizamos sinceramente y a menudo es que nos sale de lo más
profundo. Y de ahí mismo debe salir nuestro agradecimiento por este equipo. Por
algunos días bajó el crimen. Por algunos días estuvimos unidos. Por algunos
días todos fuimos rubios. Por algunos días todos gozamos. Ahora nos toca mantener
este sentimiento de celebración, porque como mencioné arriba, cuando estamos
alegres, nada puede con nosotros.
Se les quiere puñeta.
JD
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